MÚSICA
Durante toda la lucha contra el franquismo, la música estuvo siempre al lado del pueblo.
Durante la Transición, Suarez trató de apoderarse de esta herramienta e instrumentó a grupos como Vino Tinto y su canción “Habla, pueblo habla” (en plena campaña por la abstención en el referéndum de 1976) o Jarcha con “Libertad sin ira”.
La música estuvo permanentemente unida a la lucha contra el franquismo. Toda la cultura española se identificó durante la larga noche de la dictadura con las libertades y la democracia.
A finales de los años 60 la música conoce una eclosión antes desconocida en España. Aparecen en esos años decenas de cantautores ligados a las culturas y las lenguas de las nacionalidades y ligados a las reivindicaciones democráticas de los movimientos contra el franquismo.
La música adoptó la forma mayoritaria del cantautor y la poesía fue el eje vertebrador de la mayor parte de las canciones. Se recuperaron los grandes poemas de los poetas españoles, muchos asesinados por la dictadura o en el exilio. La poesía alcanzó unas cotas desconocidas de la mano de la música.
El Régimen trató de competir musicalmente con la sociedad que le arrollaba y utilizando la televisión pública, la única televisión existente, y la radio promocionó insistentemente a grupos musicales que cantaban letras preparadas para apoyar la estrategia gubernamental, en lo que fue el inicio del marketing político en España. Ya hemos señalado en este sentido la promoción del grupo Vino tinto y su canción “Habla pueblo, habla” para promocionar el antidemocrático referéndum de 1976 sin libertad de expresión ni de asociación, o Jarcha con su canción “Libertad sin ira” para apoyar a la UCD en las elecciones de 1977 con los partidos que defendían la ruptura democrática ilegalizados.
La mayor parte de los cantautores militaban en partidos políticos prohibidos y vivieron la música como un arma de lucha contra lo opresión. Lucha política, cultura y música iban totalmente entrelazadas y contribuyeron al final del Régimen.
Y de la misma forma que juntas contribuyeron a desmoronar la dictadura y traer la democracia a España, tras el triunfo de la Reforma Política y el fracaso de la Ruptura Democrática la desmovilización social y el cambio de paradigma de la música fueron de la mano. La “movida” tomó el relevo de la música comprometida de la Transición a la vez que la sociedad se desmovilizaba, el partido socialista se hacía cargo del país frente a una “radicalizada” UCD que no asumía las directrices americanas para entrar en la OTAN y la juventud se entregaba al consumo de las drogas.
Presentamos una selección incompleta y en construcción de los principales protagonistas de la música de la Transición, agrupados por sus raíces nacionales o regionales.
Gente del Pueblo / Manuel Gerena
La Bullonera / José Antonio Labordeta
Víctor Manuel
La Fanega
Lluís Llach / Joan Manuel Serrat / María del Mar Bonet / Marina Rossell
Imanol / Xabier Lete / Oskorri
Milladoiro
Los Sabandeños
Carmen, Jesús e Iñaki
Adolfo Celdrán / Chicho Sánchez Ferlosio / Elisa Serna / La Mandrágora / Hilario Camacho / Javier Krahe / Luis Pastor / Pablo Guerrero
La cuadrilla de Manuel Luna
Raimon / Ovidi Montllor
Paco Ibáñez / Rosa León / Amancio Prada / Ana Belén / Pedro Faura
Olga Manzano y Manuel Picón
Luis Eduardo Aute
INFLUENCIA EN LA MÚSICA DEL SIGLO XXI
Cantautores / Bandas / Música comprometida